Si deseas platos saludables, apuesta por la cocción al vapor
Un soplo de aire fresco siempre es imprescindible para aliviar el estrés, para encontrarse con uno mismo. Hay que pasar página a la ajetreada vida y comenzar de cero con nuevos proyectos. Uno de ellos puede ser el depurar el organismo, lo que se alcanza al beber zumos naturales, tomar mucha agua, al comer platos más ligeros.
Una técnica de cocción que nos permitirá conseguir este último objetivo es la cocina al vapor. Este procedimiento, que aviva pasiones entre los amantes de la cocina sana, asienta su éxito en el hecho que los alimentos se cuecen sin poseer contacto con el agua o implementar en ello algo de grasa. Para la cocción al vapor los alimentos se disponen en un recipiente tipo rejilla o perforado. Este elemento se encaja en una olla o similar que tiene agua hirviendo en el fondo.
Al hervir el líquido los vapores ascienden y pasan por la rejilla, de manera que cuecen lentamente los alimentos. Esta técnica logra resultados espectaculares, los productos quedan deliciosos, y permite conservar los nutrientes que poseen. Asimismo permite que los productos alimenticios conserven su aroma, su sabor y su textura original.
La cocción al vapor es un procedimiento que concede generalmente cualquier ingrediente: pescados, verduras, cereales, carnes, entre otros. Pero para que cada uno de ellos quede sabroso, es necesario que el producto a utilizar esté fresco y sea de alta calidad, ya que esta técnica de cocción no mezcla ni disimula los sabores. Todos los alimentos no poseen las mismas recomendaciones, en el caso de las verduras se deben cortar en trozos regulares, así todas quedarán cocidas a la vez y estarán en el mismo punto de cocción.
Para la cocción de los cereales se debe implementar una gasa de algodón para que los granitos no se cuelen por los agujeros del recipiente. Las carnes estarán más gustosas si previamente se maceran con hierbas, especias y un poco de aceite. En el caso de los pescados es aconsejable la cocción si están enteros o en trozos grandes y es al agua de la cocción a la que se le añaden los aromatizantes como especias, hierbas olorosas, vinagres en dependencia del gusto de cada comensal.
