Muere una ballena en las playas colombianas
Durante una de sus misiones rutinarias de patrulla por las costas, una de las naves de la Armada Nacional de Colombia avistó el cadáver de un gran cetáceo a las orillas de una de las playas de Buenaventura. El gigantesco mamífero marino encontrado, es miembro de la especie conocida como ballena jorobada, y fue hallado en La Palera, sector de la emblemática bahía del departamento del Valle del Cauca en donde el control marítimo realizaba una inspección al momento en que vio al notable animal. Rubén García, capitán de Corbeta al frente de los uniformados de la embarcación de patrullaje, señaló varios detalles del suceso a los medios de prensa.
“No es muy frecuente ver ballenas jorobadas por nuestras costas en esta época del año. Esos mamíferos solo frecuentan el área del Pacífico que corresponde a nuestra nación aproximadamente en el mes de junio y algunas semanas de julio. Por lo general, llegan a alejarse hasta 8 mil 500 kilómetros del continente antártico con tal de aparearse”, explicó el capitán García.
El militar, quien además es biólogo, enfatizó que debe de tratarse de un suceso extremadamente particular y mundial. Otros científicos se encuentran investigando lo ocurrido. Además de la rareza de que el animal se encontraba alejado de sus ciclos migratorios, destaca el hecho de que es una constatada realidad que murió debido al impacto de alguna embarcación contra su cuerpo.
Luego de que la ballena fuera correctamente ubicada por una de las Unidades de Guardacostas, se notificó a la Corporación Autónoma del Valle del Cauca para que acudiera a prestar servicios de análisis. Los biólogos concluyeron que se trataba de una hembra joven, con veinte metros de largo aproximadamente. Los expertos también determinaron que la muerte del cetáceo ocurrió en altamar, donde alguna embarcación que se encontraba navegando en el océano la golpeo violentamente. Las corrientes marinas la arrastraron hasta la bahía de Buenaventura debido al cambio de mareas que tiene lugar cada media docena de horas.
El oficial García comentó que desde tierra se estableció una unidad de reacción inmediata, pero esta solo pudo acceder a los restos del mamífero hasta que la marea volviera a subir. La intención era que el cuerpo pudiera flotar nuevamente.
“Luego le colocamos un boyarín y nuestra embarcación logró remolcarla hasta mar abierto para que pudiera continuar el proceso de descomposición de manera natural. La idea es que no se vean afectadas otras especies de peces y la fauna en general de la zona”, señaló el capitán de la Armada Nacional.
Curiosamente, a finales del mes de abril del pasado año 2017, otra ballena jorobada apareció en el sector de La Bocana también en el puerto de Buenaventura. Por fortuna, el animal no sufrió ningún percance y la Armada Nacional logró alejarla, mediante difíciles maniobras marítimas, de las costas colombinas para asegurar su bienestar. La Armada Nacional cuenta con la preparación y la ayuda de la Corporación Autónoma del Valle del Cauca y el personal de diversos parques nacionales de la zona. Gracias a esa labor han podido contribuir a preservar la vida de diferentes especies de la flora y la fauna marina loca.
La ballena jorobada es una de las especies de cetáceos más grandes del mundo. La mayoría de los adultos crecen en una media de entre 12 y 16 metros de largo, aunque algunos ejemplares pueden exceder esas dimensiones. Su peso regular es de alrededor de 36 mil kilogramos. El cuerpo de los mamíferos marinos es muy distintivo. Sus aletas pectorales son más largas que las del resto de las ballenas y su cabeza es nudosa. Con frecuencia suele verse a los miembros de la especie en las superficies oceánicas porque gustan de hacer acrobacias saltando sobre las aguas.
