Los candidatos colombianos hablan sobre Venezuela
El miembro de la Fundación Konrad Adenauer Stiftung, Hubert Gehring, dio con sus palabras comienzo al debate que se realizó para discutir el período de crisis por el que ahora mismo pasa la nación venezolana. Durante el encuentro, que se efectuó en la Universidad del Rosario y estuvo auspiciado por el diario El Tiempo, Gehring expresó su preocupación por la posible reelección del actual mandatario Nicolás Maduro en los comicios del 20 de mayo, hecho que según él causaría el incremento del tránsito fronterizo desde esa nación hacia Colombia, y agregó que esta situación de tensión podría causar que el número de “viajeros” se eleve hasta la alarmante cifra de 4 millones.
Con las palabras del miembro de la Fundación Konrad Adenauer Stiftung, Hubert Gehring, dio comienzo al espacio que se organizó para debatir el período de crisis que atraviesa la nación de Venezuela, el cual se efectuó en la Universidad del Rosario y estuvo auspiciado por el diario El Tiempo.
Gehring expresó su preocupación acerca de la posible reelección del actual mandatario Nicolás Maduro en las elecciones del 20 de mayo, hecho que podría causar que se incrementara el tránsito fronterizo desde esa nación hacia Colombia. “Estamos al frente de un volcán que está a punto de estallar”, dijo, y agregó que esta situación de tensión podría causar que el número de “viajeros” se eleve hasta la alarmante cifra de 4 millones.
Por su parte, el Coordinador Residente de Naciones Unidas en la nación colombiana, Martín Santiago, estuvo de acuerdo en que este proceso migratorio causado por el contexto político, podría ser una extensión de lo sucedido durante el pasado año, durante el cual el flujo llegó a subir hasta un 62 por ciento.
Al respecto también en torno a esa idea coincidió Ronal Rodríguez, miembro del Observatorio de Venezuela que funciona en la Universidad del Rosario. Rodríguez señaló que en medio de esta crisis económica, “Los venezolanos están sobreviviendo con las remesas que les llegan del exterior”, motivo por el cual la administración de Maduro está siendo solícita con la salida de sus compatriotas.
En el momento de exponer sus argumentos, Iván Duque, aspirante que representa al Centro Democrático, se dedicó a hacer un análisis histórico acerca de cómo había llegado Venezuela a semejante punto de tensión en el ámbito no solo económico, sino político y hasta humanitario. Duque, aseveró que Colombia no puede “caer en la ingenuidad ni en la arrogancia de creer que somos inmunes a los problemas que golpearon a otros países de América Latina”.
En orden de enfrentar las dificultades que de momento supone la avalancha humana que llega cada día a Colombia procedente de su vecina suramericana, Duque opina que debería decretarse una especie de régimen de cuotas migratorias para lidiar con los ciudadanos venezolanos, y de esta forma repartirlos en varios de los países del área, en los cuales a su vez deberían facilitárseles las visas y otros documentos de entrada.
En caso de llegar a la Casa de Nariño, el propio Duque prometió que intentaría promover que el país deje de formar parte de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), un ente internacional, que de acuerdo a su visión, ha logrado dar más alas al “régimen” chavista.
Al llegar su turno, Humberto de la Calle, del Partido Liberal, comenzó repitiendo la idea de que el presidente Maduro falla en cumplir los estándares de la democracia dentro del sistema interamericano, Maduro es un dictador”, palabras suyas cuando fue embajador de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En base a las violaciones repetidas que se han cometido en esa nación, de la Calle opinó que su caso debería ser llevado a las instituciones internacionales de justicia como la Corte Penal Interamericana. No obstante, también explicó que buscará impulsar un intercambio solidario ante la migración, además de apuntar que una respuesta radical sería darle un motivo a Maduro para tomar la iniciativa.
Por último, Germán Vargas Lleras, líder de su propio movimiento, detalló de forma resumida de su propuesta de política externa, dentro de la cual incluyó puntos como el diferento con Nicaragua y los problemas en las fronteras con Ecuador y Venezuela.
Vargas, quien se refirió al actual gobierno bolivariano como una dictadura, enfatizó en los retos que significa tal migración desde ese territorio. Por ello recomendó crear ciertos puntos de control en los límites nacionales, en los cuales se pueda dar ayuda a los viajeros.
