Llevar los ojos a la moda
Las pasarelas no son solo lugares para admirar el vestuario, también los accesorios. Uno de ellos está destinado a cuidar nuestros ojos de los rayos del sol a la par que realza o destruye nuestro atuendo. Las gafas, una vez aparecieron en el mercado, combinaron rápidamente su función utilitaria con la estética y ahora para adquirir un par hay que tener en cuenta más de un factor.
Como el verano de este año se acerca se impone hacer un repaso por las tendencias que las grandes casas productoras de gafas de sol, como Marc Jacobs, Dior, Ray-Ban o Dolce & Gabbana, proponen para estos meses. Las directrices principales para este 2018 abarcan las lentes redondas, con estilo vintage, con colores neutros, el doble puente de metal, el modelo “cat eye” y de espejo degradado, frente al abuso de las lentes espejadas con colores llamativos.
Varios estilistas consideran como lo más top a las gafas con doble puente, el cual puede estar formado de un solo material, pero si cada puente está fabricado con diferentes elementos como el metal y el acetato, las gafas tendrán un toque único que también se reflejará en tu look. Podría parecer que el doble puente es una novedad pero lo cierto es que el modelo aviador de Ray-Ban ya lo había usado hace décadas.
Lo curioso de este estilo radica en que lo puedes encontrar en cualquier otra forma de gafas de sol, incluso en las tan llevadas estilo clubmaster, caracterizado por tener la parte baja del lente sin armadura.
El estilo “cat eye” dota al rostro femenino de una mirada felina, sensual e intrigante. De gran tamaño y con colores pastel son dos características a tener en cuenta a la hora de elegirlas. Aunque se lleve lo redondo ahora, el “cat eye” no desaparecerá del mercado pues favorece muchísimo la simetría
Dicen los historiadores que los primeros lentes se fabricaron a finales del siglo XIII en la Venecia italiana, los cuales emplearon diferentes tipos de cristales para corregir los problemas de visión de las personas. También refieren que los portadores de los primeros lentes oscuros fueron los jueces de la antigua China, quienes para ocultar su mirada y no revelar los veredictos, usaron cristales oscurecidos mediante la técnica del ahumado.
Pero el primer antecedente histórico de las gafas de sol se ubica hace más de doce mil años, cuando los pueblos esquimales utilizaban todo tipo de implementos opacos para cuidar sus ojos del resplandor de la nieve. Sin embargo, estos accesorios tal y como los conocemos hoy, no comienzan a fabricarse hasta 1929, cuando el empresario estadounidense Sam Foster inició su comercialización en las playas de la costa este norteamericana.
Con la llegada del cine, los actores famosos comenzaron a ponerse gafas oscuras para evitar la agresión de los focos, hecho que extendería esta moda a partir de los años 30; pero fueron los pilotos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos quienes las popularizaron durante la Segunda Guerra Mundial. La encargada de crear los modelos fue la empresa especializada en tecnología óptica Bausch & Lomb y de esta forma nacieron las conocidas Ray-Ban, acrónimo para ray banner (barrera contra rayos).