Colombia censará a 800000 venezolanos
Un paso importante en la normalización del estatus de los miles de inmigrantes venezolanos que en los últimos meses han entrado a Colombia será el registro administrativo de estos, una acción que comenzará este viernes y que prevé censar a cerca de 800 000 venezolanos. Las autoridades consideran que alcanzar esa cifra será posible en los próximos dos meses.
Se trata, como ha declarado el gobierno de Juan Manuel Santos, de dar una respuesta humanitaria a una crisis migratoria que se ha dado en la frontera común con Venezuela, por donde a diario entran un sinnúmero de personas. Es por ello que las autoridades colombianas hicieron un llamado el pasado martes a que los migrantes sin papeles a empezaran los trámites del censo sin temor a sanciones o represalias.
Las oleadas de inmigrantes venezolanos había puesto en alerta desde principios de año al Ejecutivo colombiano, pues los territorios más afectados por esta situación son también los que menos condiciones tienen para hacer frente al problema, tanto desde el punto de vista del registro como de la infraestructura necesaria. Las consecuencias para el mercado laboral y los servicios públicos aún tienen que ser estudiadas, no obstante Colombia ha recibido el apoyo de la ONU y sus dependencias, como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El registro de estos miles de personas es un primer paso para poder gestionar adecuadamente la crisis creada, pues se requiere conocer con exactitud cuántos venezolanos son, en qué condiciones y con qué expectativas. Se prevé que el censo dure hasta el venidero 8 de junio, y el gobierno ha asegurado que toda la información recaudada servirá como soporte para la formulación y diseño de la política integral de atención humanitaria. De todos modos, el gerente del programa fronterizo con Venezuela, Felipe Muñoz, precisó que estar registrado no significa que automáticamente se proporcionará una documentación migratoria, sino que es un punto de partida para la toma de decisiones y la asignación de recursos. Conocer con exactitud de cuántas personas estamos hablando es imprescindible para canalizar la ayuda, en lo que se considera una de las peores crisis migratorias de la actualidad.
