Imprecisión durante las elecciones colombianas
La jornada electoral colombiana del pasado 11 de marzo es acusada por falta de claridad en el proceso, principalmente en las regiones Antioquia, Bogotá y Boyacá. No es la primera vez que ocurre y aunque se tomen cartas en el asunto, no parece ofrecer resultados. El pueblo aspira a un proceso transparente, contar en sus manos con la oportunidad de elegir al representante que más lo identifique, no ser parte de todo un escenario, donde simplemente son la cara, para luego en el trasfondo, politiqueros manipulen los votos. Basta ya de que la imagen de Colombia quede dañada por inconcurrencias en los procesos electivos.
Tanto la Fiscalía como la Procuraduría General de la Nación se encuentran en un proceso investigativo por las casi 291 quejas presentadas sobre la faena electoral que se llevó a cabo este domingo. Juan Carlos Cortés, viceprocurador, afirma que la mayoría de los descontentos están relacionados con violaciones a la normatividad, principalmente a lo que concierne al mal uso de la publicidad exterior y a la falta de tarjetas para la reunión interpartidista.
Dentro del control los índices mostraron, que los departamentos con el número más elevado de quejas pertenecen a las regiones de Antioquia, Bogotá, Boyacá, Córdoba, Cundinamarca, Meta, Nariño y Norte de Santander. Los estudios afirman que dentro de las denuncias 67 son disciplinarias y 224 a nivel preventivo. La mayor preocupación según alega el funcionario es el presunto ocultamiento de fichas electorales, subrayando: “Estamos investigando si pudo haber ocultamiento de tarjetas electorales, en algunos casos, para la consulta interpartidista y también reubicamos, cuando tuvimos conocimiento, de quejas concernientes con la retención de personas para ser llevadas a la jornada electoral o manejo de bienes públicos para la distribución de elementos de construcción, así como también la posibilidad de gestiones relacionadas con la compra de votos.”
Ante la apertura para algunos funcionarios del centro de Registro Nacional de un procedo de indagación preliminar por la falta de tarjetones para la consulta interpartidista, se asegura por parte del Ministerio Público establecer todas las investigaciones pertinentes para hallar a los responsables y dar a conocer lo más pronto posible los resultados de dicha indagación. El punto inicial parte de la supuesta falta de planeación en lo que refiere a la distribución de tarjetones para presentarse en las consultas interpartidistas, se asume que quizás existió un plan de contingencia, que aseguró el uso de fotocopias tras agotarse las tarjetas. La plataforma electoral con tanta falta de claridad, tan cerca de las elecciones presidenciales no constituye un factor positivo para el país colombiano, al respecto Cortés aseveró redoblar la vigilancia para las elecciones que se avecinan. El propósito es no bajar la guardia, porque las próximas elecciones así lo ameritan, la claridad debe ser la cualidad más importante en la elección de presidente de la República.
El suceso, causó gran conmoción por unas horas en Latinoamérica, uno de los principales países en alzar su voz fue Venezuela, como de era de esperar ya que sus elecciones siempre son duramente criticadas por el presidente Juan Manuel Santos. Uno de los más asiduos fue el homólogo venezolano Nicolás Maduro, quien enunció públicamente su descontento por la falta de claridad en el sistema electoral del pasado domingo, alegando la necesidad de crear vías de seguridad y garantía, así como el empleo de medios tecnológicos de alto nivel, reafirmando: "… Colombia está en el siglo XIV, en el período del medioevo, porque a la oligarquía le es conveniente un sistema medieval para hacer trampa e imponer sus candidatos."
Calificó, además la jornada electoral como un programa de comedia, criterio que fue reforzado con el comentario dirigente Diosdado Cabello al alegar: "En Colombia usted vota si tiene cómo conseguir la fotocopia. Hubo gente que dibujó un muñequito en la tarjeta, diciendo este es Iván Duque, porque no tenía cómo conseguir una fotocopia.” Es injusto para el pueblo colombiano que un evento tan importante, tenga este criterio ante los ojos del mundo, pero la realidad es que no deja de ser menos cierto que cometer fraude le resta veracidad al proceso, convirtiéndolo en una burla para la sociedad. Es de esperar que los resultados de las investigaciones realizadas por la Procuraduría General de la Nación cambien esta visión y le otorguen el peso y respeto que merece el proceso electoral en Colombia.
