Cerrando las puertas a la droga
Alrededor de 19 trochas localizadas en la área metropolitana de Cúcuta, en Colombia, han sido bloqueadas con la ayuda de volquetas y retroexcavadoras. Según reportes de la inteligencia colombiana, en el área limítrofe se han identificado alrededor de cien caminos de aproximadamente dos kilómetro que comunican a Colombia con el país venezolano.
Luego de un mes de la aprobación de plan multisectorial creado por el gobierno colombiano para entender el tema de la crisis humanitaria en Venezuela, y a raíz de que se incrementara la diáspora de venezolanos, la Policía Nacional colombiana y su Ejército se ha dado a la tarea de inhabilitar las trochas o pasos ilegales existentes en la línea de frontera con Venezuela, las cuales son una vía para el contrabando de drogas, de armas y la trata de personas.
Recordemos que Colombia en los últimos meses, en los que se ha desatado la diáspora venezolana, principalmente para proveerse de alimentos y comida, ha tendido la mano a sus vecinos con mucha solidaridad y generosidad; pero todo esto debe ocurrir en un estricto control y siguiendo las medidas de seguridad y respetando los derechos humanos. Es por ello que el proceso debe marchar dentro de la legalidas, para lo cual se ha debido ampliar la fuerza pública.
Felipe Muñoz, coordinador de este plan de carácter extraordinario, explicó que estas trochas, además de estar muy vinculadas a la actividad del narcotráfico, también han servido para el paso de migrantes de varias nacionalidades. Así lo demuestran las 14 personas que fueron detenidas mientras intentaban cruzar por estos “agujeros negros” durante el cierre fronterizo decretado la semana pasada a propósito de las elecciones presidenciales.
Estas personas se suman los otros 30 extranjeros que en los últimos meses han sido detenidos intentando emplear estos caminos. De igual forma, aunque la voluntad es llegar a eliminar completamente lospasos fronterizos ilegales, existen grupos armados que cuentan con las personas y las maquinarias necesarias para seguir abriendo trochas que, según se estima, se distribuyen a lo largo de 143 kilómetros.
La Policía Nacional de Colombia en los últimos tres años ha logrado intervenir 67 trochas ilegales, muchas de las cuales llevaban funcionando más de 20 años en función del narcotráfico.