Ronald Koeman, ¿el mecánico de la Naranja?
Luego de llegar a dos semifinales consecutivas del Mundial de Fútbol (Sudáfrica 2010 y Brasil 2014) y de subirse al podio en ambas ocasiones, la selección holandesa no logró clasificar a la Eurocopa de Francia 2016 y tampoco pudo completar los deberes en la carrera mundialista de Rusia 2018, sin dudas un descenso considerable de una de las naciones con mayor tradición victoriosa en las máximas citas balompédicas.
Ante tales resultados, un cambio se imponía al frente de la selección de los tulipanes, que en el último año estuvo comandada por Dick Advocaat, hombre que ya recogió un elenco maltrecho luego de tres temporadas con Guus Hiddink y Danny Blind en el puente de mando. Entonces, Wouter Gudde, director general del plantel holandés, apostó por un viejo conocido, el otrora estelar defensor Ronald Koeman, quien a sus 54 años ya acumula tres lustros de experiencia en los banquillos, al frente de disimiles clubes en Inglaterra, Portugal, España y su país. No obstante, su reto ahora será, probablemente, muy superior a todos los anteriores, pues deberá cambiar el criterio de la opinión pública en Holanda, donde ha decrecido de manera exponencial el apoyo y la confianza de los fanáticos en su escuadra nacional.
Koeman es muy recordado por su etapa como jugador, en la cual ganó cuatro Ligas de su nación con el Ajax y el PSV Eindhoven, y después formó parte del Dream Team del Barcelona que dominó en España a inicios de los años 90. Precisamente, con los catalanes fue el héroe de la primera Copa de Europa del club al anotar un golazo de tiro libre en Wembley que los coronó ante la Sampdoria italiana. Muy poco tiempo después de retirarse del fútbol activo, Koeman comenzó a introducirse en el mundo de la dirección y tuvo escuelas de notable importancia, pues fue asistente de Guus Hiddink en la selección holandesa y también de Louis Van Gaal en el Barcelona, antes de ser nombrado al frente del Vitesse.
Luego de esos capítulos iniciales, pasó por los banquillos de Ajax, Benfica, PSV Eindhoven, Valencia, AZ Alkmaar, Feyenoord, Southampton y Everton, y los resultados más relevantes los consiguió en su país, con tres títulos de la Eredivise. De Koeman se recuerda, además, su turbulento paso por el Valencia hace casi una década. Llegó como sustituto de Quique Sánchez Flores, luego de la transición de Oscar Fernández, y con él los de la ciudad del Turia se hundieron en La Liga, pero conquistaron un impensado título de Copa frente al Getafe. Koeman apartó a varios históricos de club como Albelda, Cañizares y Angulo, por lo cual se ganó la enemistad del vestuario y terminó en la calle antes de concluir el campeonato, en el cual el Valencia se salvó con la gestión final de Salvador González Marco, Voro.
Ahora el nivel de exigencia es muy alto, más que nada por el momento que vive el cuadro holandés, que, además de no avanzar a los principales torneos, afronta el retiro y la decadencia de sus mejores figuras del pasado reciente, como Arjen Robben y Wesley Snijder, así como la lentitud en la progresión de promesas al estilo de Memphis Depay. La primera prueba de Koeman como seleccionador de la Naranja será contra Inglaterra el venidero 23 de marzo, y después, sin Mundial en el horizonte, deberá enfocarse en la carrera rumbo a la Euro 2020 y en la Liga de las Naciones de Europa, naciente certamen que comenzará en septiembre próximo, y en el cual los holandeses han sido incluido en un complicadísimo grupo con Alemania y Francia.
