Buscando otra cura para el amor
Siempre se dice que las ideas más espectaculares y a la vez más descabelladas vienen de Asia y es que ahora en China se ha puesto de moda una nueva industria dedicada a ayudar a las parejas a separar a sus cónyuges de sus amantes, algo que se ha vuelto un negocio bien lucrativo. Esta nueva tendencia se conoce como desvanecimiento de amantes y es sumamente popular, pues muchas son las clientas que pagan miles de dólares para terminar con la infidelidad de sus maridos.
Ming Li, cofundadora de Weiging, que es el nombre de este exótico hospital, aconseja a mujeres, pues son la mayoría de losque piden ayuda en la institución, acerca del tema de un matrimonio exitoso y los secretos para evitar que las atenciones del esposo se dirijan a otra.
Una de las clientas de la institución decidió pagar a Weiging para alejar a la amante de su marido y esto incluyó por ejemplo, el envío de agentes para persuadir a la secretaria de 24 años, de que ella podía aspirar a algo mejor a salir con un hombre que le doblaba en edad.
Ming Li y el cofundador, Shu Xin, ya tienen 17 años manejando su Hospital del Amor, tienen más de un millón de clientes, dicen y hacen referencia a su arma secreta: el alejamiento de amantes. Tienen 33 formas de alejar a una amante, según explica Shu Xin.
Las cuatro técnicas principales, incluyen algún tipo de treta, como por ejemplo, convencer a la amante para que se enamore de otra persona, o intentar que el jefe envíe al marido a otra ciudad, lograr la intervención los padres o amigos, o convencer a la amante sobre algún grave defecto del marido o una enfermedad hereditaria.
Según refieren ambos propietarios y a pesar de que los medios chinos están repletos de historias sobre acusaciones de coacciones, y amenazas y violencia, el Hospital del Amor participa en nada ilegal.
También hay otra persona que ofrece este servicio de ahuyentar a las amantes, Dai Peng Jun, quien posee una agencia convencional de detectives privados. Él maneja un equipo de agentes encubiertos que ayudan mujeres a separar a sus compañeros masculinos de sus amantes. Según explica, para terminar con esas relaciones, los miembros de su equipo se hacen amigos de las amantes, y consiguen fotos y videos íntimos que luego les pasan a los clientes. Refiere que cuando el marido se da cuenta de que su amante no le está siendo fiel, usualmente la deja y vuelve al seno de la familia.
El detective está convencido de que el que él presta, es un importante servicio público, pues la mayor parte de los hombres ricos en China consideran natural tener a otra mujer, además de la esposa. Y es que el hecho es que aunque en la presidencia de Mao Tse Tung, la antigua tradición china entre hombres ricos de mantener una concubina se declaró ilegal y la igualdad de derechos para las mujeres se incluyó en la ley matrimonial, actualmente, la inmensa riqueza que las reformas económicas han generado en ese país, han hecho que hombres chinos ricos y poderosos, hayan vuelto a las antiguas tradiciones.
Los datos hablan por sí mismo y los números no desmienten la anterior afirmación, pues según una encuesta publicada en medios oficiales, el 95 por ciento de los funcionarios que fueron condenados durante la última gran ola anticorrupción del presidente Xi Jinping, tenían una o más amantes mantenidas. Además, hace tres años, el diario oficial del Partido Comunista chino publicó el llamado, mapa del adulterio, que recogía los lugares donde se concentraba el mayor número de mujeriegos.