Otro líder social secuestrado y asesinado
María del Carmen Moreno Páez, quien fuera presidenta de la Junta de Acción Comunal de la vereda (barrio) Caño Rico, había sido secuestrada por paramilitares el pasado 27 de marzo, sin embargo recientemente se ha revelado que la activista fue asesinada, siendo encontrado su cadáver el pasado miércoles, luego de cinco días de búsqueda.
El reporte de la alcaldía del municipio de Arauquita, aseguró que el cuerpo "en estado de descomposición", se encontraba "en una finca vecina al lugar donde había sido raptada", el pasado 27 de abril, por varios sujetos en los alrededores de la vereda Caño Rico, de acuerdo a lo que reporta El Espectador. Durante todo este periodo, se publicó un video en las redes sociales, en el que se mostraba a la víctima amarrada y leyendo un comunicado en el que los secuestradores se identificaban como paramilitares y además solicitaban un rescate de mil millones de pesos colombianos, el equivalente a unos 350 000 dólares aproximadamente.
Supuestamente el intercambio debía realizarse en 24 horas, hecho que claramente nos sucedió. De acuerdo a las autoridades, el secuestro fue perpetrado por "delincuencia común", a pesar de los secuestradores aseguraran que eran integrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), grupo que fue desmovilizado supuestamente durante la administración del ex presidente Álvaro Uribe. Por su parte las autoridades han pactado hacer un "consejo de seguridad", con el objetivo de diseñar un plan estratégico para conseguir la captura de los criminales.
Mariana Escobar, directora de la Agencia de Renovación del Territorio (ART), se pronunció sobre los hechos, lamentando el asesinato de la activista, quien formaba igualmente parte de los programas de desarrollo desde la perspectiva territorial. Por ello exigió el incremento de las "medidas de seguridad", en relación a ciudadanos de este tipo, con el objetivo de proteger la vida de los luchadores comunales.
Sin duda, la situación en Colombia se ha vuelto insostenible, diariamente en los noticieros se reportan asesinatos, actos de violencia, desplazamientos masivos a causa de los conflictos entre guerrillas, secuestros, actividades relacionadas al narcotráfico, entre otras ‘novedades’ que ya ni siquiera causan asombro en la población. Lo peligroso de este asunto radica en que una vez más, las autoridades e instituciones gubernamentales se quedan de brazos cruzados y no pueden controlar una situación que pronto se les podrá ir de las manos completamente.