Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

jueves, 3 de mayo de 2018

La mortalidad infantil en cifras internacionales

Por pratts23

Los peores índices en cuanto a la salud de los seres humanos, los tienen claramente los países menos desarrollados. La poca cantidad de recursos para implementar un sistema de salud efectivo que sea accesible al menos, a la mayoría de la población, se presenta como la razón fundamental de los altos índices de mortalidad que caracteriza a estos países.

En este sentido la mortalidad infantil, que indica el número de defunciones de niños menores de un año, por cada mil nacidos vivos que se registran, ya sea a nivel nacional o internacional, resulta uno de los indicadores más preocupantes para las diferentes organizaciones, principalmente la UNICEF, principal institución gestora de los derechos de los más pequeños. La consideración de este primer año de vida para determinar las cifras de mortalidad, se asocia directamente con los niveles de pobreza y acceso a la sanidad gratuita, por lo que claramente el saldo negativo en esta ecuación lo tienen los países subdesarrollados.

Por ejemplo, el primero de enero de 2018, nacieron unos 386 000 bebés, de estos el 90 por ciento, vinieron al mundo en las zonas menos desarrolladas del planeta. Desgraciadamente, de acuerdo a las cifras reportadas por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), muchos de estos recién nacidos perdieron la vida durante las primeras 24 horas de haber nacido. Determinadas cuestiones como la desnutrición o mala alimentación de las progenitoras durante el embarazo y la poca o ninguna atención médica recibida en el transcurso de la gestación, son los principales factores que influyen en los altos índices de mortalidad infantil en estas regiones.

En el año 2016, los especialistas calcularon que murieron unos 2 600 recién nacidos, durante su primer día de vida. La tasa neonatal de mortalidad infantil se incrementa en un 50 por ciento con los casos de embarazo adolescente, situaciones comunes que caracterizan estos grupos vulnerables en países subdesarrollados, donde el sistema de salud gratuita funciona de manera deficiente y los bajos índices en la educación, así como las diferentes prácticas culturales que mantienen.

Entre las medidas que intenta implementar la UNICEF para contrarrestar esta situación se encuentran entre otras el suministro de agua potable y electricidad en los hospitales más céntricos, la presencia de médicos calificados durante el parto (aunque si durante el embarazo no existe supervisión médica, es probable que la gestación no llegue a buen término) y la lactancia durante la primera hora.