Persiguendo a los falsos cirujanos estéticos del Cauca
La Secretaria de Salud del Valle del Cauca clausuró cerca de 50 establecimientos que se dedicaban a realizar procesos de cirugía estética en ese departamento colombiano. De acuerdo con las fuentes administrativas, la mayoría de esos locales no contaban con los permisos pertinentes, y en ellos eran frecuentes las anomalías en las prácticas asociadas al adecuado funcionamiento de este tipo de sitios.
Los procedimientos de belleza en ocasiones fueron acometidos por personas que no contaban con la preparación profesional necesaria o desconocían los reglamentos imprescindibles para muchos de ellos. De acuerdo con el estamento dedicado a la salud pública en ese territorio del país latinoamericano, a partir de ahora las pesquisas sobre el cumplimiento de las normas serán más exhaustivas.
La propia Secretaria de Salud advirtió que se registraron cerca de una docena de muertes a lo largo del año 2017 en la región debido a las acciones de mala praxis. Por su parte, el Instituto de Medicina Legal señaló que ocurrieron once fallecimientos más que en 2016, donde la cifra total de víctimas fue de seis personas.
La mayor parte de las defunciones y severa mutilaciones son presentadas en mujeres. De acuerdo con los estamentos reguladoras, las féminas son las que más consumen los tratamientos que ofrecen esos tipos de establecimientos y en la mayoría de las ocasiones no comprueban las referencias de salubridad de los sitios. Además, las rebajas de precios con respecto a los sitios bien regulados por lo general son considerables y las damas tratan de que los procedimientos estéticos solo afecten su apariencia y no sus bolsillos.
Los controles permanecerán y se incrementaran, según asegura la Secretaria de Salud. En el Valle del Cauca, al menos 76 centros de belleza si cuentan con los permisos imprescindibles para brindar esos servicios. Sin embargo, para llegar a esa cifra han debido clausurarse otros 38 establecimientos que no estaban en regla a lo largo del pasado año 2017.
El más reciente de los operativos para frenar las malas regulaciones sanitarias de uno de esos centros tuvo lugar en la presente semana. Un local que funcionaba como spa, ubicado en el área de la bahía de Buenaventura, fue intervenido por sorpresa para frenar las operaciones de prácticas estéticas irregulares. Las fueras policiales lograron impedir que al menos unas seis mujeres no sufrieran las intervenciones quirúrgicas programadas por los inescrupulosos trabajadores del centro.
En el mencionado spa, que por demás de no contar con los permisos requeridos, se encontraron otras anomalías. En la cafetería del local se encontraron bolsas de basuras con residuos sólidos que pudieran ser perjudiciales para la salud de las clientas. Por otro lado, fueron hallados otros elementos hospitalarios en una instalación donde todo solo deberían existir remedios naturales. Entre los principales objetos anacrónicos al interior del centro destacaban medicamentos para contrarrestar problemas como hemorragias o patologías cardiorrespiratorias asociadas a las cirugías. Así como abundantes cantidades de anestesia.
Expertos del Centro Médico de Imbanaco y los miembros de la Sociedad Colombina de Cirugía Plástica y Estética Reconstructiva lanzaron una alerta a la población de la nación suramericana para que no continúen arriesgando sus vidas a manos de esos servicios que se ofrecen sin contar con los galenos idóneos con autorización para llevar a cabo las intervenciones médicas.