Ocho policías colombianos han sido asesinados
Otro crimen es noticia en Colombia. Se trata del asesinato de ocho agentes policiales en San Pedro de Urabá, en el departamento de Antioquia. Esta zona es conocida por la violencia protagonizada por varios grupos criminales operantes, entre ellos el llamado "Clan del Golfo", la mayor banda criminal de origen paramilitar en el país.
Los agentes fallecidos se encontraban en medio de una caravana acompañando a varios funcionarios de la Unión Nacional de Restitución de Tierras. Una explosión ocurrió al paso de los vehículos y cobró la vida de ocho polivcías inocentes. Ellos son: el superintendente Fabio Sarmiento y los patrulleros Never Alonso Sierra, John Jairo González, José David Pérez, Darlin Rodríguez, Jorge Pacheco, Giovanny Rodríguez y José Alejandro Sade.
A raíz del crimen, la policía Nacional dio a conocer un comunicado en el cual rechazó abiertamente al acto que califica como “terrorista” y ofreció sus condolencias a los familiares de las víctimas. Además, anunció que se trabaja de manera conjunta con otras instituciones para conocer el paradero y capturar a los responsables del sabotaje. Hasta el momento se sospecha de la organización terrorista paramilitar "Clan del Golfo", aunque existen otros grupos operativos en la zona de Urabá que pueden estar relacionados con el hecho.
El "Clan del Golfo" se autodenomina "Autodefensas Gaitanistas de Colombia" (AGC), y está integrado mayoritariamente por paramilitares desmovilizados de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). Actualmente es la banda criminal más buscada del país y se dedica a la minería ilegal y el narcotráfico.
Uno de los hechos más recientes con los que han sido relacionados en la colocación de un paquete de explosivos en las inmediaciones de una carretera terciaria, en la zona de Canalete, provincia de Córdoba, que debía detonar, como lamentablemente sucedió en Antioquia, durante el paso de una caravana policial. El dispositivo fue enterrado en el inicio de un puente, pero fue localizado por un guía canino de la Policía colombiana y detonado. Posteriormente la zona fue revisada con detenimiento a fin de encontrar otras cargas posiblemente instaladas.
Como se ha informado en sucesos parecidos el objetivo de estos ataques es generar terror en las zonas, pues están dirigidos a cualquiera y tienen efectos mortales.
