La realeza relojera exhibe sus últimos hitos
Hace poco se celebró en Ginebra, Suiza, la última edición del Salón Internacional de Alta Relojería (SIAR), evento en donde se exhibe lo más top en materia de indicadores personales de tiempo. Allí en el evento presentaron las marcas más respetadas y también de mayor lujo a nivel mundial con una gran cantidad de sorpresas para impresionar a la competencia y ganar más posibles compradores.
Nuevos e innovadores diseños fueron parte de las propuestas presentadas esta año, siempre en busca de los máximos límites posibles. Aquí les traemos un breve reporte de los ejemplares más atractivo que pudieron apreciarse allí.
Para comenzar, la casa de modas francesa Hermès, conocida además por sus relojes, presentó su Carré H, diseñado por Marc Berthier, quien en 2010 hiciera una primera versión de este automático. Ahora el cuadrado ha crecido algunos milímetros en espesor, además de crear una caja que permite juegos de luces espectaculares.
Un miembro de la más alta nobleza suiza como IWC Schaffhausen, ahora de aniversario por los 150 años de creación manufacturera, ha decidido homenajearse y rendir tributo a la vez a una rareza como Pallweber, dispositivos de bolsillo que dejaron de fabricarse en 1890, y que ahora vuelven en edición de muñeca. Se trata del IWC Tribute to Pallweber Edition “150 Years”, que marca la hora en una pantalla digital, mientras que los minutos pueden distinguirse en una serie de discos giratorios.
Por su parte, la empresa suiza Panerai, presentó el nuevo miembro de los Due, el Luminor Due 3 Days Automatic Acciaio, que cuenta con 45 milímetros. Este Duo tiene una caja de acero pulido y esfera color gris antracita, además de ser water proof hasta la nada despreciable profundidad de 30 metros.
Hace 25 años el Royal Oak Offshore de Audemars Piguet veía la luz, y ahora para celebrarlo, la marca suiza decidió presentar una versión más sólida de su ya considerado clásico, al cual decidió rebautizar esta vez como Royal Oak Offshore Tourbillon, que saldrá en una “tirada” premium de 50 piezas.
La también helvética Piaget dio a conocer el Altiplano Ultimate 910 P, destacado por ser nada menos que el reloj de movimiento mecánico-automático más plano que se ha creado hasta la fecha, con una caja de 41 milímetros que tiene dentro nade menos que 219 piezas.
Para no quedarse detrás, la firma alemana Montblanc escogió una cromatura osada para su Monopusher Chronograph de 1958, cuyas 100 unidades en venta vendrán en un curioso verde ahumado, lo cual significa un tributo a las ediciones Minerva de la década del ’20.
Los suizos de Jaeger-LeCoultre dieron a conocer una nueva gama de la línea Polaris, que este año cumple nada menos que 50 de vida, y que se suma al Reverso como una de las ediciones más exitosas y que mayor nostalgia genera en los amantes de la relojería.
Los muchachos —y muchachas— de Ulysse-Nardin llegaron pisando fuerte, pues con su Freak Vision buscan continuar esta línea moderna, y para eso incluyen en este modelo, que marca la hora girando sobre su propio eje, además de incorporar el sistema Grinder de carga automatizada.
Para cerrar, como no podía ser de otra forma, Cartier toma en cuenta su historia, motivo por el cual presentó el Santos, inspirado en aquel que surgiera como producto de la relación profesional entre Louis Cartier y el aviador Santos Dumont, para quien se creó un reloj especial que pudiera utilizar en sus viajes. El “Santos 2.0” tiene de todo un poco, e incluye antimagnetismo, y hermeticidad hasta los 100 metros bajo el agua. Nada mal.