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jueves, 15 de marzo de 2018

El sueño marca nuestro reloj de vida

Por MaryCary

Al igual que los relojes mecánicos requieren especial cuidado, el reloj que habita nuestro cuerpo también lo necesita. Son más de 10 los genes que intervienen en la regulación de los ritmos biológicos, pero para que estos lleven a cabo correctamente su función, el ciclo luz-oscuridad es sumamente importante, de ahí que no debamos descuidarlo.

Los genes reloj, como también se les conoce, dependen en buena medida de una adecuada higiene del sueño para poder desempeñar su papel adecuadamente. Los ritmos biológicos o circadianos están relacionados con la actividad de algunos órganos del cuerpo y también intervienen en la producción de hormonas y neurotransmisores. Los ciclos de luz oscuridad, cuando no son los correctos, introducen desajustes que los científicos han asociado con trastornos de sueño y enfermedades metabólicas tales como la diabetes, la obesidad y algunas formas de cáncer.

Reyes Haro Valencia, director del Instituto Mexicano de Medicina Integral de Sueño (IMMIS) explicó que estos genes reloj y los ritmos biológicos en los que ellos inciden, es común que se alteraren en personas trasnochadoras, también en aquellas que se exponen por tiempo prolongado a las nuevas tecnologías, los que trabajan en turnos prolongados o rotatorios, así como en viajeros habituales, señala un reporte de la agencia Notimex.

La reflexión se produce a propósito del Día Mundial del Sueño, que se conmemora el 16 de marzo, en un contexto donde cada vez más las conductas son propensas a estas afecciones. Haro Vanlencia significó que entre las consecuencias del mal dormir, cuando el origen son los trastornos del ritmo circadiano, se encuentran la dificultad para dormir en el momento en que se puede hacerlo, cansancio, somnolencia en cualquier momento del día, sensación de sueño no restaurador, dolores en la cabeza, nuca, cuello o espalda, además de irritabilidad, ansiedad y depresión.

Una persona con estos trastornos puede llegar a volverse disfuncional y a tener que invertir cuantiosos recursos en recuperarse de su problema de salud, o por lo menos ausentarse del centro de estudio o trabajo para hacerle frente. Por estas razones Haro Valencia recomienda actuar bajo el lema que preside el 16 de marzo este año: “Únete al mundo del sueño y preserva tus ritmos biológicos para disfrutar la vida”.