Un sindicalista español, por la paz en Colombia
En opinión de Méndez, el primer mecanismo para repartir el dinero es la negociación colectiva, lo que contribuye a la estabilidad social. Sin embargo, afirmó que junto al diálogo social en España se han convocado varias huelgas generales desde que retornó la democracia, lo que supone uno cada cinco años aproximadamente sobre objetivos muy concretos.
Cándido Méndez, histórico líder sindical español, de visita en Bogotá, valoró este martes que la sociedad colombiana tiene que pasar a un escenario donde "la paz a exigir no es otra que la paz social". Lo dijo con posterioridad a la firma de un acuerdo entre el Gobierno y las FARC que busca poner punto final a más de cinco décadas de conflicto. Considero que del ámbito y del anhelo de la paz, la sociedad colombiana va a pasar a otro escenario, uno en el que la paz que debemos exigir es exactamente la paz social, expresó Méndez durante un foro nombrado El valor del diálogo para el avance de los pueblos.
Organizado por la Fermín Carnero, una fundación especializada en estos tópicos, el foro contó con apoyo por parte de la conocida Junta de Castilla y León, de España. Como parte de su intervención, el líder sindical español esaltó igualmente el desarrollo que las instituciones democráticas van adquiriendo en medio de un conflicto armado en el cual "han sabido cómo mantener el tipo las organizaciones sindicales". Al respecto, rememoró un titular periodístico de inicios de esta segunda década del siglo, en que leyó que Colombia es el país del mundo donde es más peligroso ser sindicalista y en 2016 más de 400 líderes de trabajadores estaban protegidos por los peligros que corren.
Por eso, Méndez consideró necesario 'poner de manifiesto' la necesidad de cambiar la situación. El que fuera secretario general del sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) entre 1994 y 2016, comentó que el diálogo social es fundamental porque el funcionamiento de una sociedad en el siglo XXI para asegurar la convivencia democrática de las personas que la integran, necesita de sostenibilidad democrática y ambiental. Para ello, aseguró que hace falta sostenibilidad jurídica, financiera, política y social. Pese a ello, advirtió de que en España el último recursos es el de la huelga general.
