Bermudas: Primer país en abolir el matrimonio homosexual
Bermudas se convierte en el primer país del mundo en revertir la legalización de los matrimonios de parejas del mismo sexo. De esta forma las autoridades del país han revocado el derecho de casarse a las parejas del mismo sexo, a pesar de que el pasado año el Tribunal Supremo autorizará el matrimonio entre parejas homosexuales.
El fallo del pasado año del Tribunal Supremo, el cual había legalizado el matrimonio entre personas del mismo sexo fue festejado por la comunidad gay, aunque también indignó a miles de persones que se concentraron frente al Parlamento de la isla en señal de protesta. En 2016, el no a la aprobación del matrimonio homosexual fue respaldado por más del 60% de ciudadanos en un referéndum que finalmente fue declarado no vinculante al no conseguirse el mínimo de participación requerida.
En cuanto a la medida actual, el ministro del Interior de Bermudas, Walton Brown, asegura que "El acto está destinado a lograr un equilibrio justo entre dos grupos actualmente irreconciliables en Bermudas, al reiterar que el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer, mientras que al mismo tiempo reconoce y protege los derechos de las parejas del mismo sexo", ha expresado Brown cuyo partido gobernante propuso el cambio de ley. La nueva ley que niega este derecho, aprobada por el gobernador de Bermudas tras obtener un amplio apoyo en la Cámara de Representantes y el Senado, no anulará el estado civil de la docena de parejas homosexuales que se habían casado hasta la fecha actual. Sin embargo, las afirmaciones del ministro pierden totalmente el sentido, ya que si bien defienden los intereses del partido y el carácter socialmente conservador de la isla, no presenta argumento de justicia alguno como lo quiere representar Brown.
Por su parte, diversos grupos que defienden los derechos humanos, en especial los de la comunidad LGBTI, han criticado la decisión y exigen a las autoridades del Reino Unido, del que Bermudas forma parte como territorio de ultramar, que no aprueben esta medida, ya que atenta contra las libertades y la verdadera justicia. Sin duda representa una ‘retroceso ‘ en el desarrollo de los derechos de la comunidad que dificulta el correcto funcionamiento de la misma, así como su integración social.
