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lunes, 28 de mayo de 2018

Venezuela tiene un presidente muy maduro

Por javierpratts

De acuerdo al segundo boletín del Consejo Nacional Electoral (CNE), elaborado en relación al 98,7 por ciento de las actas emitidas, daba por ganador al candidato del Frente Amplio de la Patria con un total de 6 190 612 votos a favor lo que lo aventajaba de sus contrincantes significativamente. Un importante golpe para la oposición y para los intereses estadounidenses en Venezuela

De acuerdo a los medios locales la credibilidad e integridad del proceso se pudo comprobar formalmente por los acompañantes internacionales, miembros del Consejo de Expertos Electorales de América Latina. Al parecer la mayoría de los votantes continúan teniendo fe en Nicolás Maduro que realmente ha tenido que enfrentar a una Venezuela convulsa y compleja, puesto que entiende y reconoce que solo hay un Hugo Chávez.

‘’Estas elecciones deben ser reconocidas porque son el reflejo de lo que la gente votó, (los resultados) deben ser reconocidos por todos los países’’, exigió el titular de la comisión de observadores, Nicanor Moscoso, tras presentar el informe del cumplimiento de las normas internacionales para la celebración de estos comicios.

Por su parte el gobierno estadounidense continúa pensando y declarando su oposición a la administración de Maduro, quien señala que esto solamente se debe a la tradicional posición injerencista de los Estados Unidos. ‘’EE.UU. está de lado de las naciones democráticas, en respaldo del pueblo venezolano y tomará rápidas medidas económicas y diplomáticas para apoyar la restauración de su democracia’’, asegura Mike Pompeo, secretario de estado de la nación norteamericana en un comunicado citado por AFP. Independientemente de la gran brecha existente entre las ideologías, estadounidense y venezolana, cada país debe ser capaz de autogestionar su situación política, económica y social, sin necesidad de la intervención de un gobierno extranjero. Este empeño de Estados Unidos por ser siempre ‘’la policía del mundo’’ debería ser sancionado por las organizaciones internacionales, quienes realmente deben representar ese papel.

La administración de Trump, además debería ser más sincera en sus declaraciones, puesto que poco le importa el respeto a la democracia o el bienestar del pueblo venezolano, ni siquiera es una cuestión de supremacía política o ideológica, sino que simplemente tienen un interés económico, debido al alto porcentaje de recursos que tiene Venezuela y que están en manos del Estado, liderado por Maduro, concretamente el petróleo y sus derivados, tan codiciados en la actualidad.