Los indígenas Awá reciben los daños colaterales
Indígenas de la comunidad Awá, pueblo amerindio que se ubica a ambos lados de la frontera entre Colombia y Ecuador, hicieron un llamado al Gobierno colombiano mediante la Unidad Indígena Del Pueblo Awá ante la presencia del Ejército de Colombia y de Ecuador, así como de grupos armados ilegales, lo que los ubica en el medio del conflicto entre las partes.
Los pueblos indígenas u originarios que habitan en América Latina son comunidades vulnerables que, en muchos países son obviados o agraviados por los gobiernos y se encuentran con difíciles situaciones de supervivencia.
Recientemente, indígenas de la comunidad Awá, un pueblo amerindio que vive a ambos lados de la frontera entre Colombia y Ecuador, hicieron un llamado al Gobierno colombiano a través de la Unidad Indígena Del Pueblo Awá (UNIPA). Los resguardos que se unieron para realiza dicho llamado fueron los de Piedra Sellada, Quejuambi Feliciana, Inda Sabaleta, Hojal la Turbia y Chinguirito Mira.
Las causas de esta alerta del pueblo Awá es la instalación desde el 1 de abril, de un grupo del Ejército en el resguardo indígena Piedra Sellada, en la frontera con Ecuador, así como la presencia del Ejército ecuatoriano en esta zona, pues se encuentran organizando operativos contra los grupos armados ilegales. Acciones que ponen en peligro a la comunidad Awá.
Las evidencias de ello son claras y recientes, por ejemplo, los enfrentamientos del 17 de marzo entre un grupo armado ilegal y el Ejército de Ecuador, en la frontera y que generaron daños físicos en las viviendas de la comunidad indígena. Este hecho provocó que los habitantes del resguardo evitaran salir de sus hogares por miedo a más conflictos.
Por otra parte, en el resguardo de Chinguirito Mira la Policía y el Ejército Nacional de Colombia entraron sin previa autorización de la comunidad. En ese sentido, la UNIPA señala que el 9 de abril pasado, efectivos de ambos cuerpos oficiales retuvieron de manera abusiva a varios indígenas del resguardo, los intimidaron y exigieron información de grupos armados ilegales.
En el comunicado conjunto realizado, los resguardos explican que para su pueblo indígena, la presencia de los actores armados legales e ilegales provoca desequilibrio tanto en lo emocional como en lo espiritual. Además, este tipo de acciones generan indignación en la comunidad, pues ellos no tienen nada que ver con el conflicto armado en el país.
En el resguardo de Quejuambi Feliciana y de Hojal la Turbia la situación es similar, pues la Policía transita por ahí e interroga a miembros de la comunidad sobre información de las guerrillas de la zona. Es por ello que en el comunicado, los indígenas exigen, a los actores armados legales e ilegales, el retiro de sus hombres de manera inmediata, y argumentan que el simple hecho de transitar dentro del territorio Awá pone en riesgo a la comunidad.
Los resguardos piden al Gobierno que tome medidas de prevención y protección para la comunidad, pues han sido informados de la posible existencia de minas antipersonas cerca de sus residencias. Además, insisten a los gobiernos colombiano, ecuatoriano y a la guerrilla del Eln, que sigan el camino a la paz para garantizar la tranquilidad de los que habitan los resguardos. También piden el respeto a su derecho de autonomía para que el Ejército y los grupos armados ilegales no pisen más sus territorios. Sin embargo, aunque la asociación asegura que han hecho distintos llamados al Gobierno de Colombia mediante comunicados y pronunciamientos, aún no tienen respuestas.
