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viernes, 13 de abril de 2018

Pienso en el hombre ideal y me imagino un colombiano

Por Mia

Los hombres colombianos conocen a la perfección el arte de conquistar. Tan así que no solo las colombianas son testigo de ello sino que se han convertido en el punto de mira de las féminas del mundo. Su caballerosidad, picardía, suavidad y calidez lo han posicionado en el ránking de los hombres más codiciados.

Todo no es el físico, es cierto que la belleza es muy característica en el hombre colombiano pero son las estrategias que despliegan quienes lo convierten en el prototipo ideal. Las mujeres de todas partes del mundo se desviven ante su arsenal técnico. Las palabras bonitas endulzadas al oído crean una total sensación en el cuerpo femenino y los colombianos son los reyes de esta habilidad.

En Europa resulta infalible ya que las europeas no están acostumbradas a la melosería, calidez y galanteo de un colombiano. Por lo general utilizan frases como: “Eres encantadora”, “Tú eres la Reina” o “Por fin te encontré” y no suele ser mentira. Siempre hay sus casos, pero la sinceridad es uno de sus principios. Asimismo el acento es el fuerte dentro de esta habilidad, es indudable que la forma de hablar colombiana ya cautiva por naturaleza, imagínese si se emplea en la conquista.

El baile es el fuerte de la generalidad de los hombres latinoamericanos y los colombianos se posicionan muy cerca de la cúspide. Pues son reconocidos en todo el mundo por su swing a la hora de bailar. Si bien cada uno de ellos llevan en su ADN esa fluidez y facilidad que encuentran a menudo tan atractivo las mujeres, los caleños son los mejores rumbeando. El colombiano siempre busca impresionar ya sea aparentando poder, abundancia y estabilidad económica. No por gusto, en la primera cita, se desenfrenan en atenciones y detalles. Sin duda a este encuentro mujeres pueden acudir con las manos vacías porque el hombre pagará la cuenta.

Conquistan con ese estilo conservador que todavía gusta mucho en Colombia y en cualquier lugar del mundo. Ellos representan el llamado hombre de verdad, con aire varonil, carácter y personalidad definida. Se muestran seguros de sí mismos, dueños de su tiempo, independientes y difíciles. Seguramente habrá otros lugares del mundo con hombres encantadores, pero los colombianos son una apuesta segura.