La malaria se expande en Venezuela
La drástica reducción de las campañas antipalúdicas en Venezuela ha provocado que el crecimiento de malaria presente los mayores índices en todo el planeta. Pedro Alonso, director del programa de la OMS contra esa enfermedad, explicó que uno de los mayores temores es que ocurra una expansión significativa a otros países.
Los países limítrofes con Venezuela, hacia donde han emigrado cientos de miles de refugiados, corren el riesgo de recibir casos de malaria, enfermedad que ha crecido de manera preocupante en la nación bolivariana. En ese sentido es increíble pensar que, en la primera campaña de erradicación de ese padecimiento en la década de 1950, el país se destacó por ser el primero en el mundo en erradicar el paludismo en amplias zonas.
Y es que en el año 2016 en Venezuela se reportaron 245 mil casos y una muerte, pero la OMS estimó cifras que ascienden a 300 mil contagios y 280 muertes. Al siguiente año la institución registró unos 406 mil casos, aunque son cifras estimadas pues el sistema epidemiológico del país es muy precario.
Por su parte, la Organización Panamericana de Salud, oficina regional de la OMS, trabaja de manera conjunta para tratar de aliviar las condiciones preocupantes. Entre las acciones que han acometido de manera conjunta con el gobierno destaca la entrega de medicamentos antipalúdicos y otros tratamientos preventivos como mosquiteras rociadas con insecticidas.
En Brasil, Colombia y Ecuador ya han sido detectados casos de ciudadanos venezolanos que huyen de las condiciones deplorables de su país y que son portadores de la enfermedad, situación que viene alerta a toda la región. Alonso explicó que, si no se controla el problema, temen que haya nuevas transmisiones. El funcionario, instó a las naciones vecinas a asegurar un diagnóstico y tratamiento médico gratis a cualquiera que llegue a un centro médico, pues “no hay nada más peligroso que pacientes con acceso limitado a causa de su estatus financiero o legal.
En Colombia, por su parte, explicó que los nuevos casos se han localizado en zonas abandonadas por guerrilleros desmovilizados, en donde jamás se han hecho controles epidemiológicos.
Finalmente, el directivo explicó que los casos de paludismo han crecido en América Latina, pero que la región se destaca en el control de la enfermedad, excepto Venezuela que vive una situación humanitaria importante.
