La guerra del narco deja un camino de muertos
El fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, denunció que casi 3 mil 500 personas han sido asesinadas como resultado de la guerra narco que se vive en el país. El magistrado señaló que la disputa por el control de la coca ha revertido los resultados positivos alcanzado con los diálogos de paz entre el gobierno y las FARC.
En Colombia en lo que va de año han sido asesinadas 235 personas más que en igual período de 2017. A punto de culminar el cuarto mes de año en curso se han registrado exactamente 3 mil 491 asesinatos en el país suramericano, cifra que implica un aumento del 7.2 por ciento. El fiscal general dejó caer la responsabilidad del disparo de estos indicadores en el crecimiento de la guerra entre bandas de narcotraficantes por el control de los cultivos de cocaína y las principales rutas de tráfico de droga.
El mandatario explicó que la disminución de la violencia en Colombia había comenzado a raíz de la firma del tratado de paz del gobierno con las FARC, pero la tranquilidad se está revirtiendo con el accionar de las organizaciones dedicadas al crimen. Un elemento que ha generado alerta es que en los 306 municipios donde se ha identificado la presencia de narcocultivos, los índices de homicidios han aumentado en un 200 por ciento. Entre los que destacan se encuentran Tazará, Ituango, Catatumbo en el Norte de Santander y Cáceres en Antioquia.
Martínez expresó en un congreso en la ciudad de Cartagena, que las principales zonas afectadas están asociadas a la salida de drogas y narcóticos, además de ser corredores para la exportación de la droga como El Darién y la frontera con Venezuela. De igual forma, mencionó el asesinato de los tres periodistas ecuatorianos la pasada semana a manos de alias “Guacho”, un cabecilla de las disidencias de las FARC que se ha convertido en el brazo derecho del Cártel de Sinaloa. Agregó que esta organización, junto con otras bandas aprovecha la debilidad institucional y de recursos de los países Centroamericanos para procesar en ellos la pasta de coca que trasladan posteriormente a Europa y Estados Unidos.
Los últimos treinta días, según el fiscal, han sido los más violentos, pues se han registrado casi mil asesinatos. En ese sentido resaltó que Colombia tiene la cifra más alta de hectáreas sembradas de coca, alrededor de 200 mil.
Finalmente hizo un llamado a los países de la región a replantearse la lucha y las políticas contra los cultivos ilícitos, pues el narcotráfico en el país sureño "amenaza la estabilidad geopolítica de toda Latinoamérica", aseguró.
