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lunes, 26 de febrero de 2018

Argentina se rebela contra Macri

Por Gabriela

Recientemente, se han realizado en Argentina una serie de protestas y manifestaciones en contra de la agenda neoliberal que aplica en el país el presidente Mauricio Macri. Una de las más recientes fue la llevada a cabo en el centro de Buenos Aires por el sindicato de camioneros y partidos opositores.

Lo que prendió el fuego para esta marcha fueron los recientes cortocircuitos entre el líder Hugo Moyano y el Gobierno, la cual es considerada por muchos como un termómetro social en un contexto en donde se acerca un punto de inflexión en las negociaciones salariales.

En el acto se pronunciaron diversos dirigentes sociales, y en su turno, Moyano dijo “señor presidente, no siga llevando adelante políticas que hambrean a la parte más sensible de nuestra sociedad, a nuestros queridos jubilados, a nuestros queridos viejo”. Desde su llegada al poder en el año 2015, Macri impulsó una apertura en la economía nacional para atraer inversiones en aras de revertir el déficit existente en el país, sin embargo, ello aun no se refleja en un mayor bienestar para la nación.

En tanto, Macri sí ha logrado el apoyo de importantes sindicalistas al otorgarle beneficios específicos para sus gremios, hecho que ha aislado a Moyano (quien había sido aliado del mandatario argentino), y lo ha obligado a acercarse a los sectores izquierdistas y del peronismo.

Moyano, quien tiene 74 años y ha estado tres veces en la cárcel, es apodado como “El Negro”, y de acuerdo con la BBC, puede incluirse entre las cinco personas más poderosas en Argentina en los últimos cinco años. El sindicalista controla el sector de los camioneros: desde los propios camiones, peajes, fronteras, distribución de gasolina y recolección de basura, dicho sindicato tiene casi 200 000 afiliados.

A pesar de que su vinculación con el complejo mundo sindical argentino, hace 15 años fue que logró consolidar un poder capaz de “paralizar” al país. Aunque da pocas declaraciones a los medios, varias veces se refiere a los prejuicios en contra de los camioneros “nos ven feos, sucios y malos”, suele decir.

Moyano, quien es investigado por dos causas, afirmó desde la marcha de Buenos Aires: “No estoy implicado en ninguna causa de corrupción por ahora. Si tuviera un problema, tengo suficientes pelotas para defenderme solo”.